Hospital HM Modelo / Virrey Osorio, 30 / 15011 A Coruña / Ver situación

Caso clínico: Fractura compleja de húmero proximal que requiere prótesis total invertida

Os acercamos un nuevo caso clínico en el que os contamos cómo ayudamos a uno de nuestros pacientes a recuperar el movimiento en el hombro y a reducir el intenso dolor que padecía tras una fractura compleja de húmero.

El pasado mes de septiembre, A.F, de 45 años, sufría un accidente de moto con caída lateral sobre el hombro. Tras este suceso, acude a urgencias y es diagnosticado con una fractura de cabeza de húmero en 4 fragmentos con ligero desplazamiento.

Mala evolución

Inicialmente se decide tratamiento conservador, con cabestrillo inmovilizador durante 4 semanas, y rehabilitación posterior.

A los 2 meses y medio de la fractura, se evidencia una mala evolución con un bloqueo completo de la movilidad actividad y pasiva del hombro.

“Profesionalmente soy tatuador. Tras el accidente, no podía subir el brazo ni lateralmente ni hacia delante. Tenía dolor constante y era casi imposible sentarme y coger un lápiz. Así no podía seguir”, añade A.F.

Excelentes resultados: recuperación del movimiento y ausencia de dolor

Tras practicar una Resonancia Magnética Nuclear (RMN) y evidenciar una lesión masiva de los tendones del manguito rotador, se decide intervención quirúrgica para implantar prótesis total de hombro invertida.

Este tipo de prótesis está indicada para el tratamiento de fracturas complejas, como en este caso, con el fin de ayudar al paciente a mejorar su calidad de vida, eliminando el dolor y recuperando la funcionalidad.

La artroplastia de hombro con la que reemplazamos la cabeza humeral y la cavidad genoidea se realiza en nuestra clínica en el mes de marzo con excelentes resultados.

Después de dos meses y medio de esta intervención, y tras 20 sesiones de rehabilitación, la situación del paciente era de un hombro no doloroso con el rango de movimiento que se evidencia en las fotografías.

A.F. se muestra muy satisfecho con los resultados obtenidos. “Estoy muy contento con la operación, no tengo dolor y puedo subir el brazo frontalmente casi hasta arriba y lateralmente ya me pasa de 110. Considero que voy viento en popa y cada vez mejor”, apunta.

“Todavía no puedo trabajar pero ya puedo realizar algún dibujo. La máquina que utilizo en mi actividad profesional tiene un peso y por ahora no puedo hacer fuerza, pero estoy muy ilusionado con la rehabilitación y la progresión que estoy experimentando día a día”, destaca.

Actualmente el paciente está de alta con una movilidad superior al 90% y una ligera limitación para la rotación interna.

Prev post
Next post