Tras ser intervenido para la colocación de una prótesis de rodilla, el paciente debe seguir una serie de indicaciones durante el postoperatorio. Este se desarrollará primero en el hospital donde haya sido intervenido, durante 4-6 días, y a continuación en su casa. Pasarán entre 3 y 6 meses, dependiendo del tipo de trabajo que realice, hasta que el paciente pueda incorporarse a su puesto de trabajo.
Durante su estancia en el Hospital
Después de la intervención, durante 2 o 3 días, en el área operatoria se mantendrá un tubo de succión. Se realizarán periódicos análisis de sangre al paciente para controlar las pérdidas y si fuera preciso se le trasfunde. También es posible que deba llevar una sonda un corto espacio de tiempo, debido a las dificultades para orinar que causa la anestesia.
El médico informará al paciente sobre los ejercicios y precauciones que debe tomar. Los ejercicios suelen causar incomodidad y para reducir las molestias puede tomar un analgésico 30 minutos antes de realizar los ejercicios y aplicar hielo alrededor de la rodilla durante unos 10 minutos después de efectuarlos.
Recomendaciones tras la vuelta a casa
El paciente continuará con la medicación que tomaba y la que se le prescribe en el informe de alta. Si precisara analgésicos debe tomarlos 30 minutos antes de la rehabilitación.
Si durante este tiempo el paciente notase una mayor inflamación o mayor dolor en la herida, exudado por alguna zona de la herida, un aumento del enrojecimiento alrededor de la misma o padeciese fiebre, debe acudir a su cirujano ortopédico o a su médico de cabecera.